El Licey va a mejorar... Verdad??

Para iniciar este escrito, voy a “plagiar” un comercial (¿vieron lo que hice?)

Si, ya sé. El Licey está en último lugar. Si, si, si, ya sé, tenemos un equipo lleno de novatos y les falta experiencia. Si, si, si, si, si, ya sé, tenemos un manager que, aunque ha ganado dos coronas, se considera poco experimentado. Si, si, si, ya sé, tenemos las mejores cheerleaders del torneo. Si, si, si, si, ya sé, si el Licey no aprieta pronto, pasaremos lo sublime la temporada pasada a lo ridículo. Si, si, si, si, ya sé, el Escogido está…

De acuerdo, sacando todas esas cosas que ya sabemos del medio, vamos a centrarnos en el tema de hoy. Como han leído, mucho se ha hablado del mal inicio del Licey esta temporada. El objetivo de hoy es aterrizar bien sobre que está fallando en el equipo y quizá, al final de este escrito, salir con un poco de más de esperanza de que algún día, citando al ilustre cantante Romeo, “esta tormenta pasara” (aunque sé que el Liceista no ha apretado el botón del pánico todavía… ¿cierto?... ¿CIERTO?).

Este ejercicio consiste en analizar, tanto del punto de vista de la ofensiva como del picheo, el desempeño a la fecha del equipo con la finalidad de identificar, primero, las cosas que debemos mejorar, y segundo, que puede hacer el equipo o que debe suceder para que mejoren las cosas. Ahora, les tengo que advertir que pudiera salir el tercer escenario, el cual consiste en una enfermera que nos escriba en un papel de recetas muy dulcemente, “lo siento atleta”. En ese caso solo nos quedaría bajar los ojos a media asta y agarrarnos la cabeza, porque hermanos, es muy duro pasar el Niágara en Bicicleta. Y como se lo mucho que a la gente le gusta leer listines bien extendidos (ja!), vamos a entrar en materia antes de que se me duerman. Prometo ser lo más breve posible (Misión Imposible VII, con lo que queda de Tom Cruise y José Gregorio Almonte, si… lo sé).

La Ofensiva Azul

Una sola palabra resumen que está mal con la ofensiva azul: Todo. Al ver los numeritos me dieron ganas de llorar o ponerme a jugar Bingo. En serio, considere el Bingo ya que nuestros padres nos dicen que los hombrecitos no lloran, pero después hice relación: 

• El Bingo tiene números
• Los jugadores del Licey usan números en sus uniformes
• Se juega Bingo con los números de los jugadores el Licey
• Ya recordé al Licey 
• Misión fallida

Así que puse a Roberto Carlos a todo volumen con la canción “Abrázame Fuerte Lady Laura”. Y así… Pero aquí no estamos para saber de mis amargues con un equipo de beisbol (aunque muchos están sonriendo porque se sienten identificados, pero ese es otro tema). Aquí están las cosas que debemos saber de nuestra ofensiva:

Lo Malo y lo Feo (olvídense de lo bueno)

• El Licey encabeza la liga (si vemos la tabla a la inversa, entiéndase de PEOR a MEJOR) en Average, Slugging, Porcentaje de embasarse (compartimos este último lugar con el Escogido, Yes!!), hits conectados por juego, extra bases, bases robadas, total de bases alcanzadas, jonrones (también compartido con el Escogido, Yes parte 2!!), carreras anotadas, etc.
• El único aspecto positivo que puedo sacar a relucir de la ofensiva del Licey es que no son los que más se ponchan. 
• Un jugador de los Toros (Tyler Moore, 4) tiene el doble de cuadrangulares que el equipo campeón completo (2).

Como pueden ver, el Licey es último en todas las categorías existentes de ofensiva, las que están en proceso de existir y las que todavía no se han imaginado que exista. Total anemia ofensiva. Sin embargo, aquí vengo yo a decirles… no teman, las cosas van a mejorar. ¿Cómo puede mejorar una ofensiva que ha estado tan mal? Aquí es donde el análisis profundo de las estadísticas y sobre todo “la Fe” entran en juego.

Viendo el vaso medio lleno

Aunque estamos mal, durante estos primero 8 juegos no hemos contado con los aportes esperados de jugadores como Rymer Liriano, Domingo Santana, Mel Rojas Jr, Darin Ruf (cariñosamente Kuf por los ponches), entre otros. Hasta ahora los que han sacado la cara a la ofensiva son jugadores con los que no se contaba para que aportaran con el bate, como son Diory Hernandez, que fue firmado luego de ser dejado libre durante los entrenamientos y ahora es nuestro flamante TERCER BATE; Elmer Reyes, que hasta ahora ha sobrepasado las expectativas que se tenían sobre él; y Nomar Mazara, el joven talentoso que debuto en grande en el único juego que el Licey ha ganado. Los factores que me llaman a confiar en una mejoría en la ofensiva son:

• La integración de Chris Parmelee, quien viene a tratar de hacer lo que Darin Ruf no ha podido hacer, una presencia en el medio del line up, y hasta ahora tiene promedio de bateo en .455 para sus primeros tres juegos.
• Por el lado SABERMETRICO, el Licey actualmente es de los equipos que menos se han ponchado y que tienen el peor BABIP de la liga. El BABIP mide el porcentaje de las pelotas que son puestas en juego y que se convierten en sencillos (como se refiere a poner la pelota en juego, no incluye los Jonrones).  A la fecha el BABIP del Licey es de .294 (dato gracias a los hermanos de Beisbol Data), cuando la norma es que este por lo menos encima de los .300; hay que esperar si ocurre la famosa “normalización estadística”. Se podría decir que el Licey es el equipo con menos “suerte” cuando conecta batazos en el terreno. Eso puede cambiar en cualquier momento.
• Se necesitan batear más extra bases o por su defecto, aprovechar mejor la velocidad de algunos jugadores ya que no estamos haciendo ni el juego rápido, ni el juego de poder. Ni cerca estamos de algunos. Estamos haciendo un juego… bueno, pasemos al otro punto.
• Futuras integraciones. Se sabe que al equipo le faltan piezas, lo delicado con las integraciones es ¿Cuando se integran? Esperemos que no sea muy tarde. Lo mejor ahora mismo es que los que están comiencen a producir, pero un Juan Francisco nunca cae mal en medio de ningún line up de nuestra pelota.

El Picheo Azul

A diferencia del a ofensiva, me voy a poner mi gorra de “Fanático en Serio” para hablar sobre el picheo azul. Primeramente, vamos a resaltar los aspectos negativos del desempeño actual de nuestro picheo:

Lo Malo y lo Feo (olvídense de lo bueno)

• El Licey tiene el segundo peor porcentaje de carreras limpias permitidas en la liga, solo detrás del Escogido. Gracias por existir equipo Escarlata.
• El picheo azul es el que más cuadrangulares ha permitido de la liga con 11. En segundo lugar hay tres equipos empates y todos han permitido solo 6. Estamos hablando de 5 cuadrangulares más que los equipos que más se nos acercan en esa categoría, y para el que no lo ha notado: 8 juegos, 11 HR… es un promedio de 1.38 cuadrangulares por partido. Algo insólito.
• El relevo azul, gran causante de nuestras penas. Aunque en tema de relevo, las Estrellas y el Escogido nos acompañan, la incapacidad del relevo azul para “apagar el fuego” ha sido evidente. Actualmente, el 48% de los corredores que heredan nuestros relevistas terminan anotando. Este indicador no es horrible, la media de un equipo está por los 40%, pero prefiero estar más cerca de los 40% que de los 50%.  El relevo azul ha permitido 8 de los 11 HR que comente arriba, es decir que al relevo le han conectado más cuadrangulares que los que ha permitido un staff de picheo completo de los demás equipos.
• No se limitan los innings grandes. A la fecha, al picheo (y defensa, debo agregar) le han anotado carreras en 22 entradas de las que se han jugado y en 10 de esas entradas el rival ha hecho 3 o más carreras. En 6 de los 8 partidos jugados el rival del Licey ha tenido un inning de por lo menos 3 carreras. Estos innings grandes sacan de juego a cualquiera y más a un equipo que tiene la ofensiva que fue descrita anteriormente. 

Estos factores negativos son claves para el desempeño de un equipo en nuestra liga. El relevo la temporada pasada realizo una labor extraordinaria, todo lo contrario a lo que hemos visto hasta ahora. En esta pelota, donde un abridor normalmente solo llega a la 5ta entrada, es de suma importancia el buen desempeño del equipo de relevo. Hemos visto varios partidos que después del 5to inning se nos van de las manos o luego que la anémica ofensiva se acerca o empata un juego, el relevo no puede mantener a raya al rival. Pero nuevamente les digo, estas cosas… pueden mejorar.

Viendo el vaso medio lleno

En nuestro estudio identificamos indicadores que muestran un gran desempeño en general del picheo azul. No, no estoy loco y si, fui yo que escribió lo que está arriba y estoy consciente de lo que puse. Calmadamente, escúchenme. Si analizamos detenidamente los partidos hasta ahora, hay un factor común. El picheo azul domina al rival la mayoría de los innings pero, como les comentaba, viene un inning donde “nos sacan de juego”. Eso, a mi entender, es perfectamente evitable. Y ni hablar de que la frecuencia jonronera del rival es insostenible (toca madera). Me resulta muy difícil creer que durante 50 partidos los rivales promedien un cuadrangular por juego. No lo quiero creer. No me digan nada… déjeme!! 

De acuerdo, ya que estoy más calmado veamos algunos puntos que debo resaltar y por lo cual estoy seguro que, al menos por la parte de la prevención de carrera (picheo + defensa) las cosas deben cambiar:

• El picheo azul ha sido de los que menos bases por bolas han otorgado de la liga y el que más poncha. Así como lo leen, por cada 9 entradas lanzadas el picheo azul poncha aproximadamente 9 bateadores, el segundo lugar 7.50. Por el otro lado, es el segundo que menos bases por bolas por cada 9 entradas otorga con 2.65. La relación ponches/bases por bolas del picheo azul es la mejor (3.40, segundo lugar 2.73).
• Este punto es puramente SABERMETRICO, así que me excusan los que no están familiarizados con la terminología que voy a emplear y “de nada” a los enfermos con las estadísticas como yo. Apoyándome nuevamente de nuestros hermanos en Beisbol Data, el XFIP calculado por ellos tiene al picheo azul como el mejor con 2.51, cuando nuestro porcentaje de carreras limpias es de casi 5. El XFIP es una estadística que trata de separar los aspectos que no controla el lanzador (la defensa) que sí intervienen en el porcentaje de carreras limpias. Actualmente el WHIP (cantidad de bateadores que dan hit o reciben bases por bolas, entre entradas lanzadas) del picheo azul esta en 1.38, que al ponerla contra el porcentaje de carreras actual me indica que este último debe mejorar. 
• Contener las entradas grandes. El relevo debe hacer mejor trabajo para evitar que las entradas sigan extendiéndose a 3, 4 o 5 carreras. Entiendo que tenemos el personal para hacerlo, es cuestión de hacer ajustes en la rotación (menos Victor Marte, Braulio Lara en momentos importantes) para lograrlo.
• La rotación abridora no ha tenido suerte. Cuando no es la defensa, es que los sacan y al relevista le dan el palo. Pero los numeritos nos indican que el desempeño hasta ahora ha sido solido. Por lo que un cambio de “suerte” puede traducirse en buenos resultados.

Comentario Final

Ya que los tengo cansados, los dejo con esta idea final. El inicio no ha sido lo que esperábamos, pero aun queda tiempo para corregir lo que está mal, continuar lo que está bien, y hacer lo que nunca se hizo (iniciar el campeonato 1-7 y ganar el campeonato!!.. ok, no sé si eso se ha hecho, alguien tendrá que ayudarme ahí pero entienden la idea). La nota preocupante aquí es la ofensiva, ya que las integraciones no están definidas por lo que me temo que debemos contar con una mejoría en el desempeño del grupo que esta. Lo bueno es que hay muchos que están jugando por debajo de su nivel, los que nos da un espacio para mejoría. Por el lado de picheo y prevención de carrera es que me siento más optimistas. Desde el inicio tenía claro que este equipo iba a depender del picheo y defensa, con una ofensiva adecuada. El picheo debe tener mejores resultados pues está lanzando para ello. El Niagara se lo voy a dejar a Juan Luis…

Hasta la próxima